PREGUNTAS
FRECUENTES

Es un método de depilación con el que se busca la destrucción térmica de las células responsables del crecimiento del pelo buscando alcanzar reducciones entre 65 a 95% del vello en la zona tratada.

También se puede acudir a la depilación láser para reducir el grosor del vello y enlentecer temporalmente su crecimiento, ayudar a mejorar la textura de la piel al tacto, la comodidad al practicar deportes o usar ropa ajustada y reducir algunas entidades molestas de la piel como irritaciones post-rasurado, vellos enquistados, foliculitis, dermatitis, manchas, entre otras. 

El láser diodo es un haz de luz que se absorbe en el pigmento del vello (la melanina) transformándose en calor, lo que logra, utilizando los parámetros adecuados, quemar las células responsables del crecimiento del pelo sin dañar la piel a su alrededor.

La depilación láser solo es efectiva en los vellos pigmentados y en los vellos que se encuentren en fase anágena o de crecimiento, pues el tratamiento funciona solo debido a la interacción del láser con el pigmento del vello y posteriormente del vello calentado con células responsables de su crecimiento (que se encuentran en la parte más interna de la raíz y  solo estan en contacto con el vello durante la fase anágena). Cada parte del cuerpo tiene un porcentaje de pelo especifico en fase anágena que varía en el tiempo, por lo que se requieren varias sesiones espaciadas en el tiempo para lograr tratar la mayor cantidad posible de vellos y tener resultados óptimos.

Determinar esto depende de múltiples factores específicos a cada caso, que incluso pueden variar a lo largo del tratamiento.  En DepiDiodo el tratamiento es 100% personalizado ya que respetar las necesidades individuales nos permite brindar mejores resultados; nuestra médica junto a cada paciente son quienes determinan la cantidad y frecuencia de las sesiones necesarias según el avance del tratamiento tras cada encuentro.

Sin embargo, para dar una idea general, suelen ser necesarias entre 5 a 10 sesiones de depilación para lograr las metas de tratamiento y se deben realizar con frecuencia entre cada mes y medio a cuatro meses, según cada cuanto tiempo vuelva a salir el vello residual.

El tiempo de duración de las sesiones depende de la preparación previa de la piel, la topografía de la zona a tratar y la velocidad del tratamiento que sea cómoda para el paciente. En general, las zonas pequeñas pueden requerir entre 5-20 minutos y las medianas a grandes entre 15-60 minutos para su depilación. 

Hay que tener en cuenta que se busca destruir la raíz del vello por medio de calor, así que es natural sentir algo durante el tratamiento. Depende principalmente del grado de sensibilidad al dolor que tiene cada individuo, algunas personas apenas notan molestia y a otras les resulta más incómodo, pero siempre se busca que sea un tratamiento tolerable.

Generalmente la sensación del láser se describe más como un jalón o pinchazo rápido que la mayoría de pacientes manifiesta es menos molesta que la depilación con cera, pinzas u otros métodos de fotodepilación como IPL y láser más antiguos. Sin embargo, es importante mencionar que esto puede depender de la zona a tratar, parámetros usados, técnica de aplicación del láser y verse afectado también por el nivel de estrés, fatiga, comodidad, día del ciclo menstrual, consumo de cafeína u otros energizantes, entre otras situaciones especiales de cada persona.

Gracias a que el láser que usamos emite un pulso fiable y cuenta con una tecnología única de enfriamiento, logramos bajar la temperatura de la piel al instante que entra en contacto con la punta del láser, evitando la sensación de quemadura y disminuyendo la sensibilidad e incomodidad durante la depilación.

No sirve en canas, pelo rojo o muy rubio.

Está contraindicado durante el embarazo y 2 meses tras el parto.

Se desaconseja en madres lactantes realizar el tratamiento en pecho o areolas antes de terminar la lactancia. 

No se puede usar sobre piel tatuada, herida, infectada o con presencia de cualquier lesión sospechosa de cáncer.

No se puede depilar en áreas muy tortuosas o en las que no se pueda apoyar adecuadamente el láser (p.ej las orejas, las fosas nasales, cicatrices hundidas o muy elevadas)  y cerca de la cuenca de los ojos.

No se recomienda el tratamiento en enfermedades agudas o crónicas no controladas, epilepsia, algunas enfermedades crónicas de la piel, tras el uso de algunos medicamentos o productos en la zona a tratar previo a la sesión de depilación y otras situaciones especiales en las que el médico no considere pertinente realizar el tratamiento.

Se debe tener precaución en pieles morenas y negras, bronceadas o muy pigmentadas; en zonas con piel atrófica (delgada), irritada, inflamada o con varices extensas; área de lunares, manchas y otras lesiones dermatológicas con pigmentación oscura; pacientes de sexo masculino o adolescentes; en personas con antecedente de infección recurrente por herpes y verrugas en la zona a tratar, hirsutismo, cicatrización queloide, tabaquismo, anticoagulación, inmunosupresión y dermatosis fotoexacerbadas; uso de medicamentos, cosméticos o sustancias fotosensibilizantes o que induzcan hirsutismo o hipertricosis;  baja tolerancia a la sensación producida por el láser, movimientos excesivos o ansiedad intensa durante sesión de depilación.

Los métodos tradicionales de depilación (cuchillas, cremas depilatorias, pinzas, hilos, cera, máquinas de arrancamiento y afeitado) pueden ser inmediatamente más económicos y rápidos, pero dado que su efecto es corto (en algunos casos incluso de solo un día) a largo plazo la inversión de tiempo y costos suele ser más elevada que un tratamiento completo de depilación láser. Los métodos tradicionales de depilación suelen ser dolorosos, irritar la piel o herirla y producen frecuentemente problemas en la piel como dermatitis, foliculitis, hiperpigmentaciones (manchas) y vellos enquistados. El láser, en manos expertas, permite disminuir e incluso tratar estos problemas de la piel, mejorando también su textura a largo plazo, pues promueve la producción natural de colágeno y elastina.

La IPL (luz intensa pulsada) y la AFT (tecnología fluorescente avanzada) son tecnologías cosméticas que trabajan similar al láser (sin ser láser); dado que manejan un rango lumínico ajustable y no de un haz de luz con longitud de onda específico, son más versátiles para realizar otros tratamientos estéticos, pero menos eficaces y seguras para la eliminación del vello. Estas tecnologías no permiten tratar tonos de piel oscuros y suele tomar muchas más sesiones para lograr un efecto depilatorio similar al que se busca con el láser (en muchas ocasiones solo logra disminuir el grosor o debilitar el vello sin eliminarlo). También, los usuarios de la IPL manifiestan mayor incomodidad comparada con la tecnología láser o incluso sensación de quemón durante las sesiones de depilación.

El Láser de diodo es actualmente el método más eficaz para realizar foto-depilación en todos los tonos de piel. Cuenta con una longitud de onda específica que le otorga características que han demostrado científicamente superioridad sobre otras tecnologías similares que se han usado en la depilación (IPL, AFT, láser de Alejandrita, láser de rubí, entre otros).  Es más específico para tratar el pigmento del vello, permite tratar todos los tonos de piel siendo más seguro que otras tecnologías en pieles oscuras y permite tratar vello más profundo pues su haz de luz penetra más en la piel.

El Láser que usamos en DepiDiodo permite además trabajar zonas grandes de manera más rápida al poder ajustarse a frecuencias más altas sin sacrificar la potencia del láser, lo que permite un tratamiento eficaz incluso en vellos más delgados y residuales que son dificiles de tratar con otros láser diodo. También cuenta con un sistema de enfriamiento especial que mantiene la punta del láser fría durante todo el tratamiento lo que aumenta la seguridad y comodidad del paciente.

Cada persona es un mundo diferente, el tratamiento debe ser personalizado para lograr el mayor beneficio. Existen muchos factores que influyen en la efectividad y seguridad del tratamiento y solo un médico capacitado, tras una evaluación meticulosa, puede determinar si la persona es apta o no para el tratamiento.

La valoración inicial se trata de una cita médica como cualquier otra pero enfocada al tratamiento de depilación láser. Se recomienda llegar 10 minutos antes de la cita de primera vez para adelantar todos los procesos de registro y disponer del tiempo completo de la consulta para lograr una mejor asesoría.

Se debe acudir con el vello crecido en la zona a valorar (al menos que se insinúe sobre la piel de 3-5mm) para que el médico pueda evaluar sus características. se recomienda evaluar de una vez todas las zonas que esté interesado en depilar (así no desee iniciarla inmediatamente) no tener que pasar por nuevas valoraciones (no recibimos pagos ni tratamos ningún área corporal que no haya sido previamente valorada y aprobada por nuestra médica).

si sufre de alguna enfermedad y esta tomando algún medicamento se recomienda tener claro los tratamientos, seguimientos médicos, medicamentos y las dosis que usa. También es recomendable llevar a la consulta o recordar los productos médicos y cosméticos que aplica en la piel.

• La tecnología usada: El láser diodo es al momento la tecnología más eficaz de foto-depilación que existe en el mercado y el láser con el que contamos en DepiDiodo ofrece otras características que aumentan aún más la seguridad, comodidad, rapidez y efectividad del tratamiento.
• El protocolo del tratamiento y experiencia del personal que aplica el tratamiento: En DepiDiodo nos dedicamos a la depilación láser para concentramos en hacerlo mejor. Nuestra médica tiene más de 5 años de experiencia en depilación láser y optimizamos nuestros procesos constantemente para poner a su alcance el tratamiento más exitoso posible. ¡No deje su salud en manos inexpertas!
• Frecuencia y numero de las sesiones: En la valoración inicial el medico diseñara su tratamiento de manera personalizada según sus características individuales, es indispensable cumplir con el cronograma de tratamiento para poder lograr un tratamiento efectivo.
• Zona a tratar: Cada zona del cuerpo reacciona diferente al láser y tiene particularidades como diferente topografía, cantidad de vello, porcentaje de vellos en fase anágena, influencia hormonal y tiempo de crecimiento del vello que hace que el protocolo de tratamiento y sus resultados varíe.
• Tono de piel y grosor de los vellos: En general los tratamientos de foto-depilación son más rápidos, seguros y eficaces en personas de piel blanca con vellos gruesos y oscuros, sin embargo, el láser diodo también nos permite tratar exitosamente todos los tonos de piel y vellos más delgados.
• Otros: Cada persona y situación es especial. Hay enfermedades, medicamentos y condiciones individuales (edad, sexo, carga hormonal, características individuales de la piel, entre otros) que hacen que la reacción al tratamiento sea mayor o menor comparada con otras personas o incluso en la misma persona en dos momentos o zonas diferentes, por lo que no se debería estandarizar para lograr los mejores resultados. 

Después de una sesión con láser diodo el vello tardará hasta 3 semanas en caer debido a que es lo que se demora la piel en expulsar el vello que venía en crecimiento y cuya raíz se ha destruido. Una vez caiga se observa un efecto de enlentecimiento temporal del crecimiento, quedando la zona prácticamente sin vello, lo que puede durar entre 1 a 3 meses dependiendo del avance del tratamiento, una vez pasado este efecto se verá el vello residual comienza su crecimiento de nuevo observándose el resultado real de la sesión de depilación que se puede notar con vellos más delgados o zonas donde ya no crece el vello de manera persistente.

Es habitual presentar un leve enrojecimiento, inflamación o sensibilidad al tacto de la zona depilada, principalmente alrededor del vello, que suele desaparecer al poco tiempo después de la sesión. Este efecto transitorio, suele ser un signo de que la depilación ha sido eficaz. También es común la piquiña y sensación de resequedad leve los primeros días tras el tratamiento por lo que es fundamental hidratar la piel tratada adecuadamente después de la sesión. Puede preguntar al médico que usar para este fin, aunque si requiere algún producto especial el medico se lo indicara antes del procedimiento.

Si se omiten las recomendaciones dadas por el médico o no se tiene los cuidados pertinentes se pueden presentar crecimiento por parches o disparejo del vello residual, infecciones en la piel tratada, manchas oscuras o claras, quemaduras, cicatrices, reacciones de fotoalergia o fotosensibilidad, exacerbacion de enfermedades crónicas de la piel y alteraciones o molestias oculares, entre otros efectos indeseados poco comunes y generalmente prevenibles. 

En casos especiales, algunas personas pueden presentar baja efectividad y fracaso del tratamiento o un estímulo paradójico del crecimiento del vello en zonas contiguas a la tratada. Los cuales son  efectos muy poco frecuente que ocurren generalmente en personas con patologías o situaciones que afectan el crecimiento del vello. 

Entrando a nuestra página de Cuidados podrás encontrar cuales son los principales cuidados que debes tener antes y después del tratamiento.

Es posible rasurarse entre sesión y sesión con cuchilla o máquina de afeitar. Se desaconseja que se haga con otros métodos pues estos contraindican la aplicación del tratamiento

Se indica uso diario de protector solar FPS50+, mínimo 2 veces al día y aumentar según exposición solar. Se recomienda usar ropa que cubra la zonta tratada y preferir el uso de protector solar con filtros amplios para UVB, UVA, luz visible e infrarrojos y con el vehículo indicado para su tipo de piel. NO se debe aplicar protector solar en la zona a tratar el día del procedimiento, pero se recomienda traer para su aplicación posterior al tratamiento si se realiza en una zona que no quede cubierta por la ropa.

En DepiDiodo tratamos pacientes desde los 15 años con el permiso de un adulto responsable, quien debe acompañar al menor de edad a la cita de valoración y al procedimiento. 

Consideramos que los tratamientos en pacientes más jóvenes, por sus niveles hormonales aumentados y otras variables características de esta etapa, son menos efectivos. Recomendamos esperar hasta la edad sugerida para evitar contratiempos y tomar una decisión más consciente acerca del tratamiento.